El modo en que los niños adquieren el lenguaje escrito condiciona el desarrollo de las capacidades de comprensión de los distintos textos con los que se enfrentan y, por lo tanto, influye directamente sobre la exitosa aplicación de las técnicas de estudio. En este artículo trataré de mostrarte cómo los distintos enfoques sobre alfabetización hacen posible o no que los chicos se acerquen y disfruten de variedades textuales.
Como intenté describir anteriormente, depende del enfoque con los que los chicos se han alfabetizado, restringirá en mayor o menor medida sus posibilidades de interpretación lectora. Es por eso que estamos en condiciones de afirmar que los niños no se han desarrollado como lectores ni escritores críticos. No saben justificar, no pueden argumentar. No cuentan con un vocabulario frondoso o acorde a sus edades. Entonces, si ni siquiera son capaces de entender lo que leen o producen, ¿Cómo llevarán adelante el desarrollo de distintas técnicas de estudio ?
Podemos decir que los niños que han aprendido a leer y a escribir con un método más tradicional no tienen todas las herramientas necesarias para llevar a cabo el estudio. Los modelos más clásicos de enseñanza han limitado la formación de alumnos pensantes. Sin embargo, y desde una perspectiva constructivista, el niño es considerado un sujeto cognoscente, que piensa, que construye sus conocimientos a partir de sus propios intereses, con lo que trae del ambiente y en interacción constante con otros pares y adultos. Estos chicos son aquellos capaces de establecer relaciones, de justificar sus elecciones y comprender plenamente lo que leen. Éstos están capacitados para poner en práctica cualquier técnica de estudio que se propongan aplicar.
Una cosa es analizar el sistema de escritura a través de escribir una lista de palabras pertenecientes a un mismo campo semántico, por ejemplo; animales, y otra muy distinta es ponerse a analizar y comprender un texto. Es importante que los niños escuchen leer a los adultos, los vean escribir con fines sociales (una carta, un mail, una lista de supermercado, etc…) para insertarlos en un mundo letrado.
Los niños deberían empezar a escribir sin frustraciones, como pueden. Ellos maduran y pasan por diferentes estadíos en el aprendizaje. Al principio no lo harán de modo convencional pero de a poco van a ir adquiriendo el lenguaje escrito. Esto parecerá que nada tiene que ver con las técnicas de estudio pero es el puntapié inicial para formar seres pensantes, creativos y activos.
Antes de finalizar les recomiendo una actividad que no sólo posibilitará a los niños ampliar su vocabulario o acercarse a la cultura escrita sino que compartirán junto a sus hijos un momento placentero para disfrutar en familia.
a) Elijan de la biblioteca del hogar (o adquieran) algún libro que sea de vital interés para los niños,
b) Siéntense junto a ellos y compartan un momento de pre lectura (puede hacer que por el título y los dibujos los chicos traten de anticipar el tema del que trata),
c) Dispóngase a leer de modo muy tranquilo y experimentando distintos tonos de voz para captar la atención de los niños,
d) Una vez finalizada la lectura, traten de reconstruir oralmente el tema central del texto. Luego puede hacer que el niño dibuje y escriba una oración representativa de lo que le acaba de leer.
Esta es una actividad que deberá prolongarse en el tiempo para lograr tener frutos positivos y lograr así éxito en el desarrollo de las técnicas de estudio.
Ana Laura Montorvino
Twitter: @LauraMontorvino